La ONU y los asesinos de lesa humanidad.
Nicolas Maduro.
“La
ONU acusa al gobierno de Venezuela de perpetrar crímenes de lesa humanidad
contra civiles”. (16, septiembre, 2024) La ONU (Naciones Unidas) ha
denunciado al gobierno de Nicolás Maduro por crímenes de lesa humanidad en
Venezuela, según un informe de la Misión Internacional Independiente de
Investigación. La misión de la ONU investigó “ejecuciones extrajudiciales,
desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, torturas, violencia sexual y
de género y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes en Venezuela desde el
2014”. La investigación se ha llevado a cabo a pesar de la falta de cooperación
del gobierno y ocurre en un contexto electoral crítico, mientras la Corte Penal
Internacional continúa investigando los abusos en el país. La ONU insiste en la
necesidad de justicia y rendición de cuentas para los responsables.
“Venezuela:
Una represión sin precedentes sumerge a la nación en una grave crisis de
derechos humanos”, dice la Misión independiente de la ONU. Los
investigadores encargados por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU
denuncian que la violencia
empleada contra los opositores ha alcanzado niveles “sin precedentes”, citando
detenciones, abusos sexuales y torturas como algunos de los métodos utilizados
por el Gobierno de Nicolás Maduro para mantenerse en el poder. Hay videos que
han sido publicados sobre las torturas en la “cárcel del terror” en la cual han
convertido los mercenarios herederos del chavismo, al otrora magnífico edificio
el Helicoide, convertido actualmente en sede del Servicio
Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y como centro
penitenciario.
Se han
declarado por lo menos 24 muertos y más de 2000 detenidos tras las
manifestaciones por el fraude eleccionario del 28 de julio. Y más de 8 millones
de venezolanos han emigrado a distintos países que los han adoptado.
Benjamín Netanyahu.
Un comunicado de la ONU (30 Abril 2024) destaca
en un gran titular que “Guterres (Secretario General) pide
poner toda la presión posible sobre Israel para evitar la invasión de Rafah”,
y para evitar la invasión terrestre de Gaza, “que mataría a miles
de civiles más y obligaría a huir a cientos de miles”. Es bueno aclarar que
Israel, luego de haber provocado e incentivado el ataque terrorista de Hamás,
el 7 de octubre de 2023, ha matado a más de 40.000 palestinos, entre ellos un
85% de mujeres y niños. El genocida Benjamín Netanyahu ha utilizado la excusa
del Holocausto, para seguir invadiendo, matando, y desplazando a los palestinos
de sus territorios, con la complicidad de los Estados Unidos.
El 20 de mayo de 2024, El fiscal jefe de la
Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, anunció que ha solicitado
órdenes de detención contra los más altos líderes involucrados en el conflicto
en Gaza entre Israel y Hamás. Khan asegura que tiene “motivos
razonables para creer” que ha habido crímenes de guerra y contra la
humanidad imputables al primer ministro de Israel, Benjamín
Netanyahu, y a su ministro de Defensa, Yoav Gallant. También considera posibles
responsables a tres jefes de la organización militante palestina
Hamás: Yahya Sinwar, quien es el jefe del grupo en Gaza, así como los
dirigentes Ismail Haniya y Mohammed al Masri.
A su vez, el fiscal general de Israel acusó
formalmente al primer ministro Benjamin Netanyahu por corrupción, en tres
casos separados que incluyen soborno, fraude y abuso de confianza. En
los últimos tiempos, Netanyahu ha estado buscando nuevas leyes que le otorguen
inmunidad ante un proceso jurídico. Los cargos por corrupción contra él,
ampliamente cubiertos por los medios israelíes, eran tan explosivos que los
principales partidos políticos del país se negaron a formar alianzas con él en
las elecciones de 2022. Esto obligó al ambicioso político a aliarse con
extremistas de derecha, como el actual ministro del Interior Itamar
Ben-Gvir, y el ministro de
Finanzas Bezalel Smotrich.
Por todo ello, a Netanyahu no le interesa
detener la guerra, ni tampoco aceptar la formación de un Estado Palestino, pues
ello significaría desnudarlo políticamente, y dejarlo indefenso frente a las
graves denuncias en su contra. El objetivo de Netanyahu y sus cómplices, es eliminar
a la mayor cantidad de palestinos, para robarles la mayor cantidad de su
territorio. Y por ello se ha convertido en un asesino de mujeres y niños (más
de 15.000 niños inocentes) que no tienen armas, ni defensas, ni nada de
terroristas. No les interesa vengar el holocausto ante los alemanes, su
holocausto es contra el pueblo palestino.
¿El papel de la ONU, es simplemente de papel?
Estos dos personajes, Maduro y Netanyahu, amparados
en el derecho a la no intervención acordada en la carta fundacional de la ONU, uno,
y en la complicidad de los grandes países aportantes de la ONU, el otro, crean
hoy las más indignas y miserables condiciones de vida para millones de seres
humanos que, sin tener ni poder de decisión, ni armas, ni fuerza de
intervención, sufren todas las consecuencias del más brutal asesinato de la
humanidad contra la propia humanidad.
Es inmoral ver esos cientos de miles de inocentes
deambular por el mundo con sus mínimas pertenencias, en busca de un lugar digno
para criar a sus hijos, mientras los señores de la guerra los roban y obligan a
abandonar su tierra, para caer en las indignas condiciones de los campos de
refugiados. O con suerte, en la benevolencia de los países hermanos. ¿Quién les da derecho a estos bárbaros sin
conciencia para expulsar, robar y matar a su conveniencia? Algo más debería
hacer la humanidad, a través de la ONU, para castigar y ejecutar ejemplarmente,
a quienes ejecutan sin piedad a los más
inocentes.