¡La vergüenza de la humanidad!
“We are the World”; dice la hermosísima canción de Lionel Richie y Michael Jackson, cuyos beneficios fueron donados a una campaña humanitaria para intentar acabar con la tremenda hambruna en Etiopía. “Somos el mundo; somos los niños; somos los que hacemos un día más brillante; así que empecemos a dar..”. Pero lamentablemente, esta canción que sacudió a media humanidad, no parecería moverles un pelo a los dictadores y genocidas que solo piensan en alimentar su ego, a costa de matar niños y familias enteras, destruyéndoles además, sus hogares y sus ciudades.
¡Hitler fue un fracaso
para la humanidad, e incluso, una vergüenza para su propia nación! Como lo es
hoy Netanyahu, para el pueblo de Israel. ¡Por suerte, hoy Hitler no es
Alemania! Y Alemania, el gran país de Europa, ha hecho mucho para tratar de
borrar esa vergonzosa etapa histórica, que los dividió tanto. ¡Por ello, no
podemos permitir otro Hitler con sus barbaries humanas, allí donde sea! Ni tampoco otro Netanyahu.
Porque no fueron
aquellos millones de inocentes mujeres, niños, ancianos, y ciudadanos comunes, cruelmente
gaseados y luego incinerados en los hornos de su bestialidad, la excusa del
actual insano genocidio del señor Netanyahu, frente a la humanidad, para haber
fabricado este nuevo ataque hacia el pueblo palestino, luego de provocar la
reacción del terrorista grupo Hamas. ¡NO! ¡Estoy seguro de que ellos no
hubieran querido repetir esa vergonzante historia, tanto para los alemanes,
como para los judíos! Los respeto mucho, demasiado. Y me siguen doliendo.
Recientemente nuestro
reconocido y premiado internacionalmente cantautor, Jorge Drexler, hijo de un
judío alemán que consiguió escapar de la Alemania nazi, y recientemente premiado
en Barcelona, tras el anuncio del premio y con estatuilla en manos, dijo que no
podía irse antes de “robar unos segundos para decir algo sobre el horror
que está pasando en Gaza”. “Un espanto como el de Hamás no se soluciona con
otro espanto, como el de 5.500 niños palestinos muertos”, y abogó
por “el fin de la barbarie” en Gaza.
Hoy, la gloriosa
reivindicación del ególatra dictador Netanyahu va contra un pueblo palestino
que -de alguna forma- aceptó compartir su territorio con esos millones de
judíos desplazados, que todos rechazaban, y nadie quería hacerse cargo. ¡Y
ahora, él, quiere desplazarlos a ellos!
El cientista político,
diplomático, y exasesor del gobierno israelí, Daniel Levy, quien lleva décadas dedicado a analizar, escribir,
hablar y trabajar en el tema de la paz entre Israel y los palestinos, afirma
que "Uno de los factores clave para entender cómo llegamos a donde
estamos hoy - le dice a la BBC - es
la impunidad que se le otorga Israel a nivel internacional", Según él,
los efectos de la ocupación israelí y la violencia estructural a la que están
sometidos los palestinos está "socavando las esperanzas de paz para
el futuro".
¿Cree que los israelíes
cometieron crímenes de guerra? -le preguntan. “Estaría enormemente
sorprendido si una investigación no llegara a esa conclusión”, responde. Y
agrega: “La organización Save the
Children ha publicado un dato que indica que la cantidad de niños
palestinos asesinados en las primeras tres semanas supera el número total de
niños asesinados en conflictos en todo el mundo en 2022”. ¡Un gran triunfo
para el señor Netanyahu!
Son indignantes esas
reivindicaciones guerreras que están destruyendo miles de vidas, y además miles
de viviendas, que dan una elemental calidad de vida a las poblaciones, en las
insensatas guerras Rusia-Ucrania - Israel Palestina. ¿Tienen derechos estos miserables
dirigentes a lanzar de sus países a miles de sus ciudadanos, propietarios de
sus viviendas, obligándolos a sobrevivir como indigentes refugiados en miles de
indignas carpas, en territorios de acogida, porque ellos no supieron lograr la
paz necesaria para respetar sus dignas vidas? No; ¡son una vergüenza! La mayoría de los
seres humanos trabajamos incansablemente, y por años, para tener una vivienda
propia donde alojar una familia. ¡Y estos genocidas las destruyen, sin importarles
los costos humanos!
¿Y cual será el
resultado de esta nueva invasión de Netanyahu sobre palestina? ¿Les robará unos
kilómetros más de territorio además de dejarlos sin miles de viviendas dignas, aumentando
los campos de refugiados, y con más de 5.500 niño muertos? Con seguridad, ni
Netanyahu ni sus cómplices y ni los dirigentes del vengativo Hamas, perderán un
solo pelo, porque los cobardes siempre se escudan en la gente. La reacción de
Hamas, no me extraña, ellos son auténticamente terroristas. Y no lo niegan.
¡Una vergüenza que
avergüenza, al gran pueblo de Israel! Estoy harto de los Hitler, los Putín, los
Netanyahu, los Maduro, los Ortega, los Hamás, los Bush, los
Kayishema, los Al Qaeda, y otros despreciables más, incapaces de asumir su
responsabilidad ante los indefensos de la humanidad.
¡Me avergüenzo de esta
parte de nuestra humanidad!
Alberto Rodríguez Genta